Música: Planes

Durante años he expuestos mi visión de las relaciones entre la música, el cerebro y la historia. He dejado de escribir en los últimos meses por dificultades puntuales y no por ello he dejado de leer y reflexionar sobre el tema. Durante unos meses me he centrado silenciosamente en un tema: ¿cómo medir la cantidad promedio de información musical en nuestra tiempo en músicos creadores, en interpretes y en escuchantes? ¿Cuánta música cabe en un cabeza? Este asunto a su vez se relaciona con otra dimensión consubstancial con. la cuestión de qué formato neurobiológico – cognoscitivo correlaciona con la actividad de un cerebro musical. La tercera cuestión consiste en definir un modelo sobre la creatividad musical, un caso concreto de la competencia diferencial que los humanos despliegan en su relación estrecha con un sonido organizado en una mente a partir de un contexto social concreto.

¿Puede establecer un criterio certero, independiente de la subjetividad pura, que permita decidir si la música de J.S. Bach es preferidle intrínsecamente a la de Julio Iglesias o por contra tenemos que admitir imposibilidad de decisión entre estilos distintos mediados por el tiempo histórico? ¿Qué factores universales podría. ser señaladas y medibles, y en que cantidad de certeza aportaría a a la cuestión de comparar productos distanciados intergeneracionalmente? ¿Qué dimensiones hacen a la música un proceso que aporta belleza, de manera precisar aquellos que no dependan del contexto concreto? También es válido el problema contrario ¿qué aporta la cultura y el momento social bien acotados históricamente a la creación musical? Estas cuestiones hunden sus raíces en la existencia misma de estilos musicales y sus transiciones. Hablamos, y escribimos por tanto, sobre cómo se genera la música, el núcleo de funciones que comparten escuchantes, intérpretes, creadores.

Plugins Fiction

Reedición de un artículo 2010.

Este es un post creativo a partir de las lecturas, debates y conversaciones sobre las máquinas y los plugins que he tenido que leer y a veces sufrir. Nos parecen un tema con gran interés no siempre tratado con detalle, uno de esos temas recurrentes que podría cambiar lo forma en que se mezcla y masteriza en los próximos años. Las políticas de inversión económica, renovación e incluso la competencia entre empresas pasan por interpretar debidamente los recursos digitales.  La posición personal y técnica de una persona referente a las diferencias entre máquinas físicas y digitales en procesamiento musical determina una buena cantidad de un programa de inversiones y selección de proyectos. Por lo general, creo que muchas de estas fuentes de información adolecen de ser en exceso simples, de no precisar suficientemente los principales términos que usan hasta que el punto de que al final no se sabe de qué se habla. Otras fuentes son maniqueistas o dogmáticas por principio. No es frecuente encontrar datos precisos sobre cómo se «fabrica» los plugins o sobre la evolución de los ingenieros informáticos en este campo, bien desde la programación informática, bien sobre cómo se crea un emulación de una EQ o compresor. Los plugins son a veces una replica del funcionamiento fiel o aproximada de sus circuitos electrónicos y transformadores de una máquina física ( hardware ) como por ejemplo el compresor – limitador Zener de Chandler o el Distresssor de Empirical Labs. Hay que considerar la posibilidad de que nuevos plugins no sean réplica de clásicos si no que tenga su origen en prototipos físicos desarrollados específicamente para ser modelados.

Programar un plugins es no fácil, construir un plugins como modelo tecnológico para que emule un aparato analógico requiere un departamento con no pocos recursos. No nos centraremos en cómo se fabrican desde cero los plugins. Estamos en fase de documentación. A modo de resumen:

«Hay dos formas básicas para un diseñador de plug-in para el desarrollo de un módulo de procesamiento de imitar la calidad sonora de un análogo específico o procesador digital. Una de ellas es (i) pasar una variedad de señales estáticas y cambiantes a través del dispositivo, medir las características de entrada a la salida de todos los ajustes del panel frontal, y luego desarrollar DSP código (Digital Signal Processor) que emula con precisión esos cambios. El otro es el de examinar el diagrama del circuito y modelar los diversos bloques de componentes (utilizando uno de varios programas disponibles en el mercado), para (ii) generar una función de transferencia de entrada a salida (s). Esa función matemática a continuación, se puede utilizar para generar las rutinas DSP que emulan el dispositivo en cuestión. La mayoría de los desarrolladores se combinan ambas técnicas, junto con un montón de mejoras de código basado en la experiencia de modelado antes, y algunas sesiones de escucha intensivas». SOS 10-2010

Lo habitual en los foros y comentarios de expertos es encontrarse con información en los que simplemente se enumeran las ventajas del dominio digital frente al físico, o a la inversa. Otros lo enfocan exclusivamente desde el punto de vista de su utilidad, lo cual no está nada mal. Algunos enfrentan el sonido de los plugins contra los artefactos físicos con enchufe y extraen de esta comparación conclusiones universales contra cualquier plugins presente o futuro. Muy pocos de los artículos, reflexiones en webs especializadas, o blogs expertos consultados enmarcan el tema de hardware y el plugins dentro de un contexto coherente y riguroso, aunque sólo sirva más tarde de referencia cuestionarlos. Este cometido está muy lejos de nuestras capacidades. Si que nos gustaría aportar algunas consideraciones generales para ordenar un poquito el tema y luego aventurarnos a la futurología con la total certeza que las cosas acabarán siendo bien distintas. Este post es un atrevimiento y espero sepan disculparme por ser un poco «enterado».

«Angry Bird» es un juego popular muy utilizado en el parlamento español durante las largas y tediosas sesiones. Consiste en superar diversas etapas mediante el lanzamiento parabólico de objetos. Lo interesante del juego es que es una emulación compleja de la fuerza de la gravedad y de las leyes físicas que rigen el comportamiento de los objetos a los que se aplica una fuerza con un vector, de la física de proyectiles. El juego es, por supuesto, una «emulación virtual» de objetos como las catapultas, los morteros o los temibles trabuquetes de la antigüedad. Los resultados de jugar a Angry Bird en la tablet nacen y mueren en ese espacio imaginario de la pantalla de la tablet, por eso decimos que es virtual, en principio no debería tener efectos sobre el mundo real. Ningún bloque lanzado por uno de estos ariscos pájaros puede llegar a tocarte jamás. Alguién tendría que tirarte la tablet a la cabeza para que ocurriese algo semejante.

Los plugins no son sólo emulaciones virtuales por el sencillo hecho que los resultados del procesamiento digital si tienen efectos reales y directos sobre el entorno musical. Son máquinas con  efectos reales en el modelado de audio, en la mezcla y en el mastering. Son un tipo de máquinas que sin duda modifican las propiedades del sonido mismo de modo semejante forma en que los harían máquinas con enchufe como el compresor TCL-2 Twin de la empresa Millennia. ¡ Buen aparato por cierto ! El plugin es una máquinas procesadora con una electrónica digital programable y por tanto susceptible de mejora. Un diseño de un plugins puede ser más complejo que un diseño de su  super compresor con tecnología discreta, sembrado de chips.

Hay que admitir que en el actual estado tecnológico la tecnología del procesamiento digital tiene serios problemas «en reproducir al 100%» algunas características de los sistemas analógicos, en especial que exhibe (i) el gran ancho de banda, (ii) el comportamiento no lineal presenta los mayores desafíos en crear modelos precisos». Otras variables están muy bien replicadas. Una vez expresada este punto débil no sería un error podemos afirmar que los plugins son aplicaciones informáticas, hardware digital, a  disposición de cualquier ingeniero casi como si dispusiese en realidad de un excelente compresor de Millennia junto a él o ella. Casi, cierto por ahora. Máquinas informáticas – digitales  y máquinas analógicas son dos casos de una máquina universal. ¿Qué es una máquina universal? Es un concepto, un término científico: cualquier aparato formado por partes móviles y organizado conforme a un diseño particular con capacidad para reproducir un comportamiento determinado mediante las leyes y principios de la física y la ingeniería. Una máquina es virtual reflejan sus resultados en el entorno natural tal y como comenté al principio del post, pongamos, por ejemplo, las simulaciones del «túnel de viento» en un computador sin «tuercas, tornillos, y turbinas». Podría ser concebidas como es una máquina física tan real como una máquina de 2 millones de euros. El desarrollo de la informática comenzó con la virtualización o emulación virtual de comportamientos muy especializados como el diseño aerodinámico. La capacidad para controlar aspectos del mundo real fuera del laboratorio el siguiente paso. en cuanto a los procesadores musicales sólo nos interesa que haga una emulación en condiciones controladas.

No hay límite para la emulación. Si el procesamiento analógico con sus circuitos electrónicos, sus válvulas o chips es factible registrarlo en términos del lenguaje de la física entonces podemos establecer sin problemas que, en un alto porcentaje, máquinas virtuales o analógicas harán más o menos lo mismo. Todas las características o propiedades que provoca la transducción analógica sobre la señal de audio de entrada también podrían ser replicadas por los máquinas digitales. Nada impide que pueda ser modelada una propiedad física. En resumen, fabricar un buen plugin es cuestión de una serie de instrucciones digitales bien ejecutadas  – con conocimiento de las dimensiones físicas que replica  – de tal forma que la onda senoidal sea coincidente en ambos casos cuando el sonido sale por los parlantes. Por supuesto, siempre queda aliento en el personal para creer en los “pajaritos preñados” o en la “intervención divina. En este terreno cambiante y en constante evolución no es conveniente decir » no se podrá… «; incluso pensamos que si existe una tecnología fuerte para el desarrollo venidero será el terreno digital que descanse sobre investigación física de laboratorio. Desde nuestro punto de vista esta afirmación admite pocos grados de controversia.

Los plugins pueden ser emulaciones reales de otros equipos, en especial de aquellos equipos analógicos que han resultado ser exitosos. Por ejemplo, los plugins de LA-2A de Teletronix son una emulación concreta del compresor físico real que pesa 12 kilos. El plugins – máquina digital ( es una unidad ) «simula» el comportamiento de una máquina pesada hecha con circuitos electrónicos muy variados, placas de metal, transformadores, válvulas, celdas ópticas…. Emular significa reproducir el funcionalmente un un objeto complejo. Puede ser una emulación recreada de las propiedades físicas de aparato analógico de Teletronix o puede ser una imitación pobre. La correcta adecuación de los plugins y las máquinas analógicas no se discute ahora. Basta con afirmar que son dos casos de máquinas en las que la máquina informática emula el comportamiento de una máquina analógica, de esas con el botón On – Off conectado a la red eléctrica de 220 v. Una emulación nunca mejorará el sistema imitado, a lo sumo podrá igualar.

No obstante, será factible diseñar plugins que mejoren los actuales sistemas analógicos sin necesidad de emularlos. Además, los plugins emulan al hardware físico en condiciones ideales, con un perfecto mantenimiento y asumiendo que el hardware tiene un historial sin averías o arrastre problemas mecánicos ocultos. Los plugins no son en exclusiva  una emulación informática de un aparato analógico con amplio historial, prestigio y muy caro como he dicho en el anterior párrafo. Ha sido el primer papel que se le ha asignado en el desarrollo de la tecnología informática aplicada al audio. Por ejemplo, es factible pensar en un plugin cuyo diseño no se corresponda con ninguna máquina analógica concreta. En este caso los plugins no se corresponde con ninguna otra invención hecha con anterioridad no son sólo emulaciones, si no máquinas procesadoras de audio originales e innovadoras. Este punto es uno de las dificultades más recurrentes en los debates:

(i) los plugins se mueven en una realidad virtual (falso) y

(ii) los plugins son emulaciones (falso a veces).

(iii) Los plugins son una clase cosa imperfecta, y los sistemas analógicos originales son perfectos (falso).

Una manera sencilla de caracterizar los plugins podría ser afirmar que son simplemente modelos tecnológicos ( lo que entendemos por una réplica ) del comportamiento del audio en determinas condiciones. Un modelo general es una representación lógica ( abstracta e ideal a la vez ) de un tipo de proceso del mundo real de tal forma que podría replicarse en una variedad diferente de soportes. Un plugins – máquina informática y una máquina analógica son dos réplica que reproduce un modelo general con exactitud, por ejemplo una onda senoidal con «punch». Lo que se replica no son los aparatos, son las propiedades físícas de sus elementos y sus interacciones . Este tema no es fácil. Lo que se modela son las leyes físicas, el comportamiento de sonido procesado en unas condiciones concretas. En resumen, un plugins es un modelo tecnológico concreto, una réplica informática de las leyes de la física y la ingeniería que controla el comportamiento del sonido en determinados circunstancias. Angry Bird replica el comportamiento gravedad tal como pudiera ocurrir en un entorno real. Al contrario, los plugins de reverberación, replican realmente la física del audio en ciertas condiciones porque disponen ambos de un modelo físico real del mundo. El aparato analógico reverberación, por ejemplo una máquina TC-Electronics, y un plugins de reverberación sofisticado comparten el mismo «conocimiento físico» del comportamiento del sonido en el espacio». En un caso esta inscrito en código electrónico, en otro es una instancia plasmada con los caracteres binarios del código informático.

Nada impide (i) que se diseñe un circuito original en formato de informático de una forma nunca reproducida por las máquinas analógicas. Por lo que asumir lo contrario es una suposición infundada apoyada en la costumbre. Nada impide tampoco que (ii) en algún momento alguna máquina analógica replique un desarrollo digital.  En términos tecnológicos cualquier sistema físico relacionado con el audio podría ser modelado por un sistema de plugins + máquina informática con la potencia adecuada. Este será el punto fuerte en los años próximos y tal vez su genialidad. Condición necesaria «sine qua non possum sequor» : las empresas que fabrican plugins tendrán que invertir en investigación física básica y desarrollar laboratorios para experimentar, e ingeniería informática o, al menos, abrir subscripciones de las principales publicaciones del campo. No se avanzará en tecnología de audio sin experimentación, sin que se generen modelos objetivos y precisos del mundo de sonido. Los plugins pueden ser emulación o ser un diseño por completo original.

La emulación de un hardware, nuestro compresor Millennia, no es otra cosa que un tipo concreto procesamiento con el plugins que lo imita serían son dos casos posibles del mismo diseño lógico. El diseño lógico sintetiza todo el conocimiento necesario para que una «máquina tipo» pueda reproducir un comportamiento modelizado. En términos funcionales es lo mismo un transistor físico que un programa que imita transistor si producen los mismos efectos. A esta doctrina se le conoce como funcionalismo.

Futorología:

  1. La potencia de cálculo del procesamiento digital resultante de la investigación en sistemas microelectrónicos e incluso con ingeniería cuánticas, con el aumento de los sistemas de memoria en capacidad, velocidad e interconexión jugarán a favor de las máquinas informáticas. Potencial innovación ilimitado con los equipos digitales- plugins.
  2. Tendencia de los rendimientos decrecientes en el hardware analógico  del audio. Pequeñas mejoras en la calidad de los equipos analógicos requieren inversiones muy elevadas. Por el contrario, inversiones medias en la tecnología de modelado de los plugins producen incremento de calidad notables.
  3. Sistema híbridos como lo de Zsys o Weiss son un punto de encuentro entre el dominio físico y el dominio digital e irán en aumento. Compresores como «Compress» de Dangerous Music avanzan por la misma vía de desarrollo y es un hardware controlado digitalmente, especialmente la respuesta del ataque y la relajación, sin olvidar las funciones de predicción «overhead» imposibles hasta ahora para un dispositivo totalmente analógico. Las EQ de Betlemaker avanza en interfaces digitales integrados.
  4. La mayor eficiencia de los plugins afectarán a la políticas comerciales de las empresas productoras de máquinas analógicas que no tendrán más remedio que aumentar su costo para sobrevivir en un medio de competitividad extrema. El aumento del costo del hardware tiene que ver tanto con el costo de los componentes físicos como de la competencia de los plugins en el entorno del PC y Mac. Los plugins son un elemento decisivo en la política de precios.
  5. La investigación en física y electrónica del audio lo desarrollan en estos momentos las empresas de hardware. Las empresas fabricantes de máquinas informáticas deberán dedicar una parte importante de sus beneficios a la investigación, desarrollo e innovación en la física y la electrónica básica. Sin ciencia fundamental no pudeden existir buenos modelos.
  6. La integración de las teorías físicas con las teorías (pseudoteorías a veces) psicofísicas serán un hito más que probable en el desarrollo de la ingeniería de audio aplicado a las máquinas informáticas. Opciones híbridas como «Elixir» de Flux, «Inflator» de Sonnox, o la opción XL de Brainvorx o similares irán en aumento. El desarrollo de esta intersección entre las teorías físicas y las teorías sobre cómo se construyen las sensaciones y percepciones del sonido no tienen porque conducir necesariamente a una mejora en el procesamiento del audio.
  7. El campo de diseños lógicos se manifestarán en una tendencia a la creación de máquinas informáticas antes que máquinas físicas, por razones de costo. Es muy probable que las máquinas físicas antes de ser fabricadas pasen a ser plugins.
  8. El interface GUI de los plugins es ilimitado en sus posibilidades: flexible, ergonómico, puede recoger la experiencia del usuario con permanentes sugerencias en la reorganización de la interface gráfica misma. Los plugins se ajustarán a un tipo concreto de manipulación del usuario frente a a rigidez del hardware.
  9. No existe ningún argumento definitivo contra la posibilidad de que los sistemas informáticos puedan reproducir el comportamiento del hardware con exactitud y todo detalle imaginable. Incluso es factible pensar que el procesamiento digital pueda aproximarse mejor a la respuesta ideal de los transductores físicos. La potencia de procesamiento digital permitirá implementar procesamiento digital con mayor profundidad que su hermano físico. Si la calidad de un dispositivo de audio depende de la consistencia y profundidad del procesamiento nada impadirá a los plugins mejorar notablemente la respuesta del hardware analógico.
  10. Con respecto al ecosistema de las máquinas físicas: el orden de procesamiento, la intensidad y nivel del procesamiento paralelo, la toma de decisiones  referentes a las interacciones sidechain y/o paralelo requieren un hardware muy costoso y limitado. En definitiva, es mucho más sencillo y económico controlar las interacciones en un entorno digital, vigilar lo que sucede entre los diferentes equipos de procesamiento para poder cambiar el orden y las características sobre la marcha sin tener que recablear las conexiones de entrada y salidas de todo el hardware. A modo de ejemplo, los sumadores más complejos del mercado como Sigma de SSL ya proponen un sistema híbrido de control de sus equipos físicos a través de DAW. En cierto sentido funcionan como plugins. Lo mismo sucede con alguna empresa que permite controlar sus módulos S500 con el sistema informático implantado en protools o logic.
  11. Los logros en los nuevos sistemas de programación, los diseño inspirados en redes neuronales, los algoritmo biológicos, la aparición de crecientes grados de inteligencia artificial, la lógica difusa, el diseño redundante, la facilidad para crear procesos en paralelo muy complejos y dinámicos también serán todos un factor positivo respecto al uso de plugins. Las máquinas biológicas apotaran nuevos enfoques a las tareas de procesamiento. La biología y la ingeniería de la inteligencia artificial revolucionarán la perspectiva en la compresión de los plugins. Simplemente el hardware físico será incapaz de procesar a la velocidad requerida y en grado de complejidad exigida. El futuro son las aplicaciones informáticas en arquitecturas digitales increiblmente rápidas y flexibles.
  12. El desarrollo de la tecnología informática permitirá disponer de más potencia en la modelización del sonido en comparación con sus semejantes analógicos. Los samplers de piano del futuro serán tan realistas como el piano mismo, hasta el punto que generará un nuevo instrumento con más capacidades que piano, exactamente igual que este hizo con el pianoforte 200 años antes. El excedente de procesamiento en las máquinas informáticas serán motor  mismo de la innovación tecnológicas en la música.
  13. El discurso de la eficiencia del hardware no es eterno pese a ser el argumento preferido de las grandes empresas de hardware. La competitividad, la posibilidad de aportar ventaja comercial obtenida por el uso de una tecnología física frente a la informática se verá reducida, e incluso es probable que ocurra justo lo contrario tal como hemos apuntado.
  14. La investigación de nuevos materiales en el plano procesamiento físico relacionado con el audio mejorarán tanto las encarnaciones de los plugins como las máquinas físicas, si bien el implemento en hardware analógico será muy costoso.
  15. En la actualidad, respecto al terreno de los limitadores, las soluciones digitales son mejores sistemas que el mejor dispositivo analógico, como por ejemplo los limitadores que conozco que es SPL y WEIS, más preciso y transparente que su competencia analógica con la relación económica 1:25 a su favor. Respecto a los EQ el terreno se estrecha también.

Disculpen el atravimiento de escribir sobre temas tan distintos de una manera tan vaga y rápida. También por tener el descaro además de establecer tendencias sobre datos tan genéricos. He reiterado algunas ideas claves quizás más de lo debido. Algunas predicciones son muy evidentes e independientes de los argumentos que señalado. Cada uno de los argumentos supone un enorme campo de debate especializado, con numerosa bibliografía técnica por consultar. Este post es más bien un relato de ficción con una sano un intento  de instar al debate.

En definitiva, los plugins forman una unidad de procesamiento con el hardware informático. No es una realidad virtual o paralela. Pueden apuntara a ser una emulación – recreación de hardware analógico clásico o ser completamente innovador y creativo. Al igual que las máquinas analógicas, los plugins son modelos tecnológicos, replicas de la física y hijos de la oportunidad tecnología.

Pro Coro

En estos momentos el sistema educativo se somete a un valioso proceso de reajuste para atender a las necesidades del presente. Surgen propuestas por doquier. Algunas de estas se dirigen hacia nuevos áreas de conocimiento relacionados con la educación emocional y sentimental, con la creatividad.  Aparecen nuevas disciplinas y enfoques a la luz de las demandas sociales y personales del siglo XXI, en especial por el interés de las familias de acceder a un estilo educativo cada más completo y equilibrado. La escuela cambia aunque lo hace con extrema lentitud. En paralelo se abre a materias innovadores vinculadas a diferentes proyectos interdisciplinares, muchas de ellas relacionadas con actividades  transversales, aquellas que tocan diferentes disciplinas a la vez. Las actividades complementarias son ahora una vía abierta y eficiente a la hora de cultivar una parte del currículo dirigidas al formar ciudadanos aptos para las exigencias venideras, para el bienestar personal y colectivo, para la felicidad en un entorno social saludable. La enseñanza del canto coral se inserta en este contexto.

La paradoja de nuestro sistema educativo es que dedica más tiempo a la reiteración cansina de contenidos convencionales que al acomodo de nuevas estrategias y contenidos en la formación de nuestros hijos e hijas mientras no para de repetir que hay que forzar cambios y adaptarse.  Un contrasentido. Llega el momento de replantearse este escenario, renovarse e integrar contenidos formativos cuya naturaleza sea imprescindible e inaplazable a la luz de nuestro conocimiento más certero. No podemos transitar siempre por las mismas calles, en especial si el camino se hace largo y angosto. Por suerte la materia de música aglutina diferentes modalidades y son todas necesarias en este cambio de perspectiva que hemos mencionado y pensamos que debe ocupar una presencia no inferior a la Educación Física, a la Educación para la Salud o la Informática. Dentro de este entramado de nuevas reinterpretaciones es necesario afrontar con descaro la actividad programada del canto coral que debería ocupar un papel esencial, una apertura natural hacía una educación auténticamente formativa en convivencia y en un clima de un buen entendimiento con otros currículos más convencionales.

Se ha comentado con reiteración los beneficios de la enseñanza y la práctica musical: (i)  como proceso organizador de la psique y predictor privilegiado del éxito personal, (II) sea como catalizador de las competencias cognitivas vinculadas a las matemáticas, (iii) como incentivo del pensamiento espacial, (iv) como mentor del lenguaje, (v) como acto creativo y de expresión artística, (vi) o bien, como agente socializador  mediador evolutivo de nuestros hijos e hijas. La música, y la coral muy especialmente , (viii) produce un equilibrio entre el hemisferio lógico y el hemisferio imaginativo, contribuye decisivamente a la integración de procesos de cálculo muy segmentado Junto con la actividad  intuitiva del naturaliza global. Procesos algorítmicos junto con pensamiento heurístico.  La música es una actividad holista, sincroniza mecanismos cerebrales muy dispares y alejados entre si en la certeza cerebral, de ahí que no sea un error la afirmación de que la música es la actividad humana que implica una mayor cantidad de extensión de cerebral especializado, hablamos de las las famosas áreas cerebrales, funciones complejas como  la percepción, la creación y la ejecución musical.  Hablamos de un proceso especial que pasa inadvertido cuya naturaleza es esencial en la escuela. Y esto es una parte del problema, la actividad musical se encuentra tan presente e interiorizada, tan  sobreexpuesta a nuestros sentidos que es frecuentemente subestimada. 

Desde la perspectiva de la psicología y las neurociencias ahora sabemos con exactitud milimétrica que la música potencia la destrezas cognitivas de forma gradual y progresiva. LO hace en un doble sentido, a la vez dentro del contexto temporalmente bien definido como de forma longitudinal o intergeneracional, esto es, que está presente a lo largo trayecto propio del ciclo vital de las personas sin importar la edad de referencia, en cada momento, con igual importancia. Debería bastar lo anterior para que el legislador educativo inserte una materia de música como troncal en las diferentes etapas académicas del sistema educativo. Pensamos, y sugerimos al legislador, que sistema educativo obtendrá mayores beneficios si la práctica de la música coral fuera una constante desde infantil hasta bachillerato. Estos argumentos no descansan sólo en la transmisión de la música como formación cultural, como inculcar referentes culturales válidos para interpretar el pasado y el presente. Nuestro punto de vista es que la formación musical coral tiene efectos positivos tangibles y medibles que sólo pueden obtenerse con la música cantada. La formación musical coral aplicada a lo largo de todo el ciclo evolutivo es un instrumento excepcional e insustituible. 

Más allá del recitado de los tópicos que vinculan a la educación general  con las emociones, rara vez se dice que el canto coral expone y ordena las emociones humanas de manera directa e inmediata, posibilita la consciencia y expresión de los sentimientos en perfecta sincronía intrapersonal ( tu mundo privado ) e interpersonal ( tu mundo en interacción social ) y lo hace además a lo largo del tiempo, tal como hemos mencionado varias veces. A diferencia de la actividad deportiva, una materia también importante, creo que no nos equivocamos si afirmamos que la práctica musical reporta un beneficio general sobresaliente con independencia del grupo de edad que la práctica. 

Es evidente que la actividad deportiva reconduce igualmente la expresión emocional. No obstante, la actividad musical realiza una sensibilización proactiva. A diferencia del deporte, cuya relación con las emociones es regulativa en el sentido que tiene un proceso inhibitorio, un tipo de aprendizaje que descansa en aplazar las respuestas agresivas. Por contra , la música coral (co)educa la sensibilidad, modulada por las emociones en una suerte de descubrimiento personal potenciador del individuo dentro del grupo. El sentimiento, y el reconocimiento personal del mismo, es también una medida de la inteligencia humana. Lo mismo, podría decirse sentimiento de pertenencia a un grupo de iguales en las que todos los miembros sincroniza en el mantenimiento de un objetivo colectivo, sin duda una características fuerte de la enseñanza del canto coral, un rasgo de las asignaturas del futuro.

La formación deportiva es esencial en la autorregulación emocional, en la creación de hábitos saludables, y también es un proceso de socialización. El deporte promueve la superación personal inserto en un contexto de competición. Es a todas luces obvio que el sistema reconoce los parabienes que hablan de la importancia de actividad física y la dota con un número de horas importantes y necesarias que no discutimos y nos parece una inversión “en futuro”. La enseñanza musical, en especial la coral, actúa en el mismo sentido que otras materias con la ventaja de que sensibiliza, enriquece una expresión emocional más amplia, creativa y refinada.  Pensamos que promueve las emociones proactivas, aquellas  que conducen al sentimiento de grupo en el que cada miembro se proyecta a los demás de forma más creativa que inhibitoria. Los beneficios de las prácticas corales en la vida académica y extra académica potencia y corrige en el actual sistema educación sin entrar en contradicción con otras disciplinas o prácticas extraescolares. Nuestros alumnos deben disponer de horas suficientes para la enseñanza musical en el mismo sentido que  las tiene en educación artística o prácticas creativas. La inclusión de la práctica musical corregirá de inmediato décadas ausencia de la educación emocional y afectiva enfocada a la vida de una persona en sociedad, una bonita forma de fortalecer las relaciones entre individuo y el grupo, acercarán a los grupos humanos a la experiencias intercultural más extendida, al único idioma común que habla la especie humana: la música.

Muchas personas sienten la música casi como una vía única de expresión. Una parte de la los artística comparten esta idea y esto es esencial para entender la comprensión compartida que nuestras generaciones tienen del mundo. La música es uno de los principales sistemas de referencia. En un sentido más amplio, nuestra especie crea sus relatos  más profundos utilizando las infinitas conexiones entre el sonido y el silencio. Ella convierte en un discurso comprensible aquello inalcanzable e inaccesible para lenguaje verbal, lo que está latente y necesita de sonido y forma musical. Hay demasiados ventajas en la enseñanza del la música coral para no permitirnos ignorarlas. Nuestra memoria engrana nuestros recuerdos con notas musicales, el único signo mnémica que resiste a el olvido. Nadie puede olvidar una melodía.  En realidad, la música es “una ganga”, y lo es mucho más cuando atañe al ejercicio del canto coral porque agrega una dimensión social que le es primitiva, universal, sustancial e inseparable la de la condición humana. Un sistema educativo que se precie no puede desdeñar la inclusión de la música como una herramienta fundamental. 

En resumen. La música coral mejora y une a las personas, enlaza a los intérpretes con el auditorio a través de un discurrir creativo independiente de su edad, su género, de su condición social e incluso de su cultura nacional. Escuchamos música aún sin reconocer el código del lenguaje hablado en el que se expresa, cuando se carece de conocimiento preciso de la función social directa para la que fue compuesta. Hay una actividad universal constante en la especie humana, es la música. Si existe una práctica de inmersión en un entorno global abierto,  ésta es la música coral. El pensamiento musical no sigue las mismas reglas y restricciones del lenguaje hablado o escrito. Por debajo de su habla subyace un juego de símbolos latentes y universales, algo cuya materia es el sonido primitivo organizado, un impulso universal que utiliza las estructuras cerebrales necesarias que más tarde serán necesarias para catapultar otras funciones cognitivas.   

Decenas de estudios con alto valor científico demuestran la estrecha conexión entre la música y la mejora de las capacidades cognoscitivas y personales como hemos mencionado, también es una técnica rehabilitadora y terapéutica en sí misma. La condición biológica de los homínidos que ha sido incorporado en nuestro genes a través de dos millones de años de tránsito evolutivo nos ha llevado a la comunicación musical antes que la verbal. Los recién nacidos escuchan el lenguaje humano como música antes de desentrañar el significado verbal de la palabra. En la edad adulta, una frase sin prosodia apenas transporta información semántica. Podemos situar la actividad musical, y por extensión el conjunto coral, en el origen indeleble de la mente humana. Más tarde emergerán por encima ciertas capacidades  expresivas y comunicativas que llamamos “lenguaje hablado” sin que emborrone o delegue ni un ápice el pensamiento musical a un espacio mental inferior o subordinado. Recordemos que los niños y niñas hacen música, estructuran los sonidos para que sean portadores de una semiosis  reconocible y universal. Lo hacen antes de empezar a hablar, nunca se abandona pese a recibir sobrevenido el código materno del lenguaje hablado.   

Quien les escribe imparte clases en los últimos treinta y cinco años. He sido investigador y participado en empresas altamente especializadas. Nací en un ambiente sembrado musicalmente y estudio con atención la estrecha relación entre la música, cerebro y el tiempo histórico. Considero imprescindible la ampliación de la enseñanza musical en general, y de forma más concreta la incorporación del canto coral dentro el currículo educativo y dejar de eludir aquello que es consustancial a la naturaleza humana y además nos beneficia.

Escucha I y II

Escribí hace dos años acerca de la tecnología de grabación en relación con las decisiones que toma el técnico de grabación a la ahora de afrontar una producción musical. El origen de este post fue una pequeña charla que impartí en un foro con unos amigos en Holanda en 2017. La añadí alguna referencia discográfica del 2019 para esta versión del blog.

Escucha I.

En realidad el título debería ser cómo escucho la música cuando trabajo como productor, y en segundo lugar. Hay algo en este post de detectar errores y confirmar virtudes propios. Necesitas para avanzar buenos modelos y, a veces resolver malos modelos no tan buenas propuestas. Muchos de estos posibles errores detectados son cometidos por mí mismo. Una observación que deberá estar presente durante la lectura de esta primera parte, y de las siguientes.

Si ha leído esta segunda parte, y la primera imagino que pensará que las grabaciones actuales son muy malas, lo cual es una impresión incorrecta. Las técnicas de grabación, la formación académica, los adelantos en la ingeniería de grabación y procesamiento analógico y digital, el talento creativo e interpretativo es hoy día mayor que en cualquier otra época, aunque no es perfecto, no perfecto para un determinado criterio entre otros muchos como en un juego de espejos caledoiscópicos. Quizás, y un “quizás” pequeño, podría sospecharse que las grabaciones suenan muy bien aunque parecen también muy iguales. Posiblemente la excelencia de los medio de grabación destaquen en las grabaciones de estudio en las que se registran los instrumentos por separados y se mantiene bajo con control escrupuloso todas las variables. En las grabaciones realizadas en situación de grandes salas de conciertos o una única sala empleada “ad hoc” con tal fin sin estar preparadas para ello, con técnicas de grabación en directo, en una única o muy pocas sesiones, lo resultados no sean tan espectaculares.La nuestra es un cometido difícil.

Netabora: Escucha II

Quizás la característica a la que presto atención es cómo se comporta las fuentes de sonido en el espacio general de la grabación, antes incluso que analizar la calidad misma del sonido. Todo el tema musical debería ser consistente, realista y coherente a los largo de toda la grabación. El instrumento debe estar situado con la profundidad y presencia justa en relación con la intensidad, a su vez con el resto. Por ejemplo, si escucho la Sinfonía «Pastoral» Opus 68 de Beethoven en un fragmento en que la flauta desarrolla un tema, valoro instintivamente si la intensidad de la misma se corresponde con su situación en la orquesta, detrás de las cuerdas en el centro ligeramente a la izquierdo. Me pregunto si los decibelios percibidos de la flauta son lo que realmente tendría en directo o si han sido reforzados para ganar presencia. En este segundo caso, entro en consideración si este realce en la edición es realista. Ahora en bastantes grabaciones clásicas – románticas, siglos XVIII y XIX, se le asigna un refuerzo excesivo y muy selectivo, principalmente sobre los instrumentos que tienen un papel especial en el desarrollo orquestal. Se convierte al escucha en una sucesión de cambio de planos sonoros en la búsqueda del detalles y en su transiciones. El técnico editor prepara para usted lo que su consciencia auditiva debería hacer por sí misma. La flauta ocupa un espacio más amplio, muy intenso respecto al resto, en especial sobre su propio grupo orquestal de maderas luego decaer de forma anodina y ceder su protagonismo a otro instrumento hacía la que su atención se dirige casi inevitablemente. Muchos puntos acentuados. La flauta sube y baja, se hace grande o pequeña, exhibe timbre «solista» sin serlo para pasar después a ser un humilde instrumento empastado. El grupo central de micrófonos cada vez articula menos a la totalidad de la orquesta, se ve muy afectado por la dinámica protagonista de los micrófonos «spots», esos que están muy cerca de los instrumentos. Muchas grabaciones se editan en una gigantesca suerte de relevos instrumentales.

Las grabaciones de los años 50, 60 y 70 del siglo pasado el desarrollo orquesta estaba en una suerte de acuerdo entre el ejecutante, siempre dispuesto tomar protagonismo, y el director por lo general centrado en situarlo en la posición exacta. En cambio ahora, cada vez hay más micrófonos próximos, y menos de refuerzo exterior. En una grabación convencional de estilo clásico de gran orquesta pueden intervenir hasta 30 micrófonos. El sistema central de grabación, tres micrófonos, parece ser lo menos importante. Para algunos productores orquestales el hecho de invertir 15K en un sistema de micrófonos principales les parece un escándalo, un desproporcito y acaban por pensar que 1/3 de la inversión obtendrán el mismo resultado, que están sobrevalorados … . La inversión se centra en estos casos en adquirir procesadores de audio como compresores o máquinas de reverberación artificial con el extraño propósito de «salvar la obra de su propia sala». El problema para algunos es que creen en una versión orientada a la edición de los detalles, a menudo mejor que una composición de la mezcla orientada al espacio abierto. Dudoso. Un factor que influye en esta decisiones es asumir que la grabación orquestal debería comportarse como el lenguaje cinematográfico – visual, con una selección permanente de los planos por parte del realizador sobre los que debería centrarse el escuchante como si se tratase de una narrativa visual. Un punto de vista. Creo que nos nos equivocamos si pensamos que la dinámica y timbre global de la orquesta se ve muy resentida por esta técnica de edición y mezcla. ¿Qué pasa con las figuras de las violas que apoyaba a la flauta en su momento estelar? Casi han desaparecido, se pierde textura.

Un solista debería ser reforzado en al proporción justa. En un concierto es para piano y orquesta por lo general la orquesta es un órgano sonoro y vivo muy potente. El piano no debe estar en primer plano en la grabación cuando la orquesta ataca con «tres F». En realidad, una persona en la fila diez del auditorio le costaría diferenciarlo de la orquesta que lo envuelve de forma salvaje. El escuchante adivina el piano. Sin embargo, en muchas grabaciones sobrevive con claridad y presencia del piano frente a la energía descomunal de la orquesta. Habría que estudiar cada obra en concreto para poder hacer una estimación realista, conocer cuáles son las ideas del interprete y el director, y esperar que sean realistas. Lo mismo pasa con las voces solistas.

Si escucha la última producción del sello discográfico Eudora Records con el pianista Josep Colom en formato SACD y alta resolución nativa DSD observará una óptima continuidad sonora en todo el registro. Un sonido coherente y creíble. Escucha el piano en el ambiente en el que las dinámicas de las últimas sonatas de Beethoven suenan dentro y fuera del piano a la vez bien sincronizadas, en la sala. E muy probable que el lector de este extraño post no tenga conocimientos amplios de las técnicas de grabación multicanal para producir un SACD. En este punto lo que debe saber es que es una meta en extremo compleja en el que el ingeniero tiene control bien localizado del sonido en tres dimensiones que debe distribuir en cinco canales de escucha. Es una forma de grabar muy rica, sin perder de lejos que es también una forma “refinada” de escuchar.

El plan de grabación y mezcla ha sido diseñado para extraer la riqueza armónica del instrumento, lo que definiríamos como una lectura próxima del instrumento junto con un plano medio y alejado que sitúan el piano en ambiente sonoro real, en una sala, tantas veces ignorado en las grabaciones “hiperpresenciales” demasiado encima del instrumento. Este plan requiere hasta cinco sistemas de micrófonos con diferentes cometidos que deben mezclarse con criterio y”muy buena mano”. En muchas grabaciones a los instrumentos se les niega el espacio en el que fluyen. Por lo general la escucha de matices queda encadenada a una dimensión cercana y se pierde la interacción instrumento- sala y los juegos del sonido más remotos. En grabaciones muy directas, a veces los mecanismos internos del piano, martillo y pedales por ejemplo, tapan las relaciones armónicas sutiles. Es un placer escuchar la grabación de Eudora Records y dejarse llevar por la sonoridad amplia y reverberante en los ataques y fuertes del piano. Por supuesto, la magia funciona si el pianista piensa en el instrumento más allá de su posición. En este sentido el pianista Josep Colom realiza un trabajo formidable que quedaría inadvertido sin la pericia del ingeniero de sonido. Si quiero escuchar música mas allá de mi observación técnica (o deformación) eligo en primer lugar este tipos de grabaciones, luego me entrego a la música sin darle más vueltas. Si quieres escuchar este disco te recomiendo que lo descargues en NativeDSD. En alta resolución streaming en formato MQA en TIDAL suena realmente bien también para una escucha en estéreo.

Escucho el sonido indirecto. Lo que queda después de la emisión del sonido, la forma en que decae y se combina con el resto como un rumor que se aleja. Disfruto con las texturas sonoras, la envoltura the armónicos tenue de los instrumentos en una sala, lo que refleja o devuelve la sala, el sonido resultante cuando se extingue. No es sólo reverberación, es reverberación con contenido. Muchas grabaciones modernas hacen lo posible por eliminar el espacio reverberante para enfatizar el sonido directo. Es un problema. Los instrumentos suena en la sala, esto es evidente, unos respecto a los otros en un espacio compartido. Los grandes compositores, instrumentistas solistas y directores saben que la escritura armónica, la línea vertical del pentagrama, no tiene sentido si no se le permite fluir. No hay música sin espacio. Hay que escucharlos, desviar la atención hacia la parte del sonido que tiende a cero. En ocasiones el ingeniero de sonido persigue el efectismo mediante bruscas dinámicas, golpes súbitos golpes armónicos y luego abandona la orquesta a la abulia hasta el próximo espectáculo. En este momento, durante la escucha de nuestra imaginada sinfonía entran nuevamente las maderas y trompas con brillantez y luego se les retira artificialmente el aire necesario para que sus acordes avancen. Las secciones de cuerda se reemplazan unas a otras en la lucha por captar la atención, sonido que no permanece en el espacio. Por fortuna, hay expertos que hacen las cosas muy bien. Espero con entusiasmo el acceso a grabaciones con respaldo en sistemas multicanal en un entorno cotidiano y económico de escucha. La grabación estéreo frontal ha arrinconado el espacio, cada día una dimensión más inventada que real.

Puedo escuchar una grabación de los años cincuenta con un equilibrio perfecto entre sonido directo e indirecto. No me importa que el sonido carezca de detalle suficiente siempre que la versión aporte significado, una clase contenido que describe algo. Podemos encontrar mayores cantidades de ruido en las versiones en extrema calidad de grabación y, por contra, hallar señal en versiones pobres en el registro analógico pero sensibles al espacio. He escuchado versiones de obras magistrales en una radio barata con plena satisfacción personal, si bien es cierto que me hubiese gustado mucho hacerlo con mejor fidelidad.

Existen muchas versiones maravillosa de los cuartetos de cuerda de Beethoven. Se necesita alta fidelidad y verosimilitud entre el espacio físico y la mezcla diseñada por el ingeniero para que alguna de estas versiones pueda sobresalir de las demás, siempre asumiendo que tanto la ejecución técnica como la lectura interpretativa han sido sencillamente excepcionales. Cuando atiendo a la producción musical no disfruto nada. Percibir y aprender. En el otro caso, cuando la escucha musical va más allá de la producción me adentro en la música misma, sin entrar en consideraciones de materia técnica de sonido y audio. Asumo que la grabación es buena y simplemente disfruto. Mi conocimiento previo de los intérpretes es fundamental aquí aunque no decisivo. Me asombro de los detalles y pericia interpretativos, de tratamiento del tema, de alegato musical y del mundo estético que loa acompaña, en adivinar sentido de las notas con la intuición y lógica necesaria para no convertir la escucha en un tema demasiado analítico. Como todos busco un cierto tipo mensaje inexpresable con el lenguaje, en constante equilibrio entre lo expresable y lo inexpresable. Lo otro es una forma de trabajo.

Escucha II

No escucho de la misma forma la música cuando asumo un rol de experto que cuando do asumo el papel de aficionado y entusiasta. Ambas perspectivas se alternan si a veces bien me gustaría olvidarme por completo del aspecto técnico que atañen a la grabación, edición y masterización. Este tipo de comentarios personales coinciden con la toma de decisiones que se adoptan en uno o varios momentos del proceso de producción musical y que quedan estampados en el medio e reproducción. Cuando escucho música trato de inferir cuales han sido las decisiones de los ingenieros, cuál plan involucrado y sus limitaciones, algo parecido a tecnología inversa. Una o dos veces al mes investigo sobre las producciones que me gustan, las empresas de grabación, ingenieros y técnicos, y muy rara vez pregunto por email. Tengo mucha surte y por lo general me contestas muy amablemente. Debo advertir que son impresiones personales sin pretensión de presentarlas como algo objetivo. Doy por sentado que si una persona experta discrepa conmigo lo probable es que él tenga la razón. Procedo a resumir los temas tratado en otro post.

  1. Relación sonido  directo / indirecto. El complicado maridaje entre el sonido general de la sala los micrófonos grabados en un plato próximo.
  2. Edición por secuencias, «corte y pega» para entenderlos, unión de fragmentos hasta crear una unidad aparente. Controvertida sin que sea posible una descalificación automática. El punto de decisión es la pericia técnica del interprete y la objetividad de los hechos. No se puede presentar un nivel de competencia que no se ha adquirido, ni se podrá adquirir. Corrección dentro de un estilo y una capacidades puede ser factible. Preferencia: estilo sin edición y en un entorno completamente analógico, grabación sin edición en un entorno digital, y edición mínima correctiva.
  3. Excesiva presencia de instrumentos por los micrófonos, y su contrario, pérdida del ambiente que da unidad y credibilidad a la producción, lo dota de sentido histórico y arquitectónico. Mejor un micrófono que dos, mejor dos que tres, …. .

Continuamos. A veces escucho un sonido demasiado grueso, lo que denomino como una excesiva dependencia de la ecualización activa y dinámica, y por otras partes ecualiziciones muy agresivas, con grandes pendientes. Se añaden decibelios extras por aquí y por allá. Por contra, la ecualización substractiva, quitar decibelios con una curva bien ajustada, parece haberse olvidado. En algunas producciones se acentúa el matiz tonal y se corrige poco. La EQ en realidad no debería ser percibida y, sin embargo, se presenta a los oídos como un sonido denso, grueso, en ocasiones con matices exagerados a los largo de todas frecuencias. Este tema queda claramente manifiesto en la ecualización de las voces en los que se intenta lograr «por adición tonal» la respuesta que el micrófono o la voz no logran por sí mismos. Estas láminas de «pintura tonal» a veces enturbian la respuesta de buenos micrófonos. Los micrófonos transparentes son una opción frecuente y suele ocurrir que se «maltrata claramente su respuesta natural » con procesamiento añadido que acarrea dureza y un matiz tonal para el que no fue diseñado. A veces se pierde la microtextura «de seda» y/o la profundidad en el eje Y. Si tienes la suerte de grabar con un micrófono U4K7 del fabricante Kahayan -en realidad es igual o mejor que el U47 Neumann original- no necesitarás hacer demasiadas cosas para que la voz quede enmarcada en un contexto sonoro y tímbrico sencillamente perfecto, con un extremo suave tono «valvular» que no entra en conflicto necesariamente con las grabaciones clásicas transparentes. No están por ahora entre mis recursos aunque desee que pueda incorporaré dos unidades junto que el previo que Pablo Kahayan ha diseñado para ellos. Confiamos muy poco en los instrumentos de grabación neutros o con textura suave y deseamos en exceso artefactos tipo ecualizador – compresor multibanda. A veces aplicamos respuesta estereotipadas EQ con equipos con una firma sónica con textura como por ejemplo  de TubeTech «High and Low Helving» -no recuerdo ahora mismo el modelo exacto-, movemos las pendientes de forma muy mecánicas y al final lo que conseguimos es un sonido «denso» con «aire» en la parte alta. A veces no se explora lo que tiende diferente la voz, o el instrumento, que sería la información más valiosa. Es proceso es el contrario.

Le confieso que lo siguiente que comentaré me incomoda mucho. Tiene que ver con la selección de un determinado tipo de hardware en apariencia muy transparente que, no obstante, dejan un rastro sonoro en la esfera digital que no dudaría de calificar también como duro y áspero, especialmente en las partes medias- altas y altas. Muchas veces me parece un sonido punzantes, estridente, inquieto, revuelto. Un sonido tenso. El problema en mi opinión se halla en las tecnología de las cápsulas de los micrófonos, en sus amplificadores internos, y/o en la tecnología de conversión AD que si bien es silenciosa no resuelve satisfactoriamente la conversión analógica. Otra causa puede ser el sobre procesamiento de la señal digital. En realidad existen unos pocos equipos óptimos para la grabación clásica con garantías. Por desgracia no son económicos. El 90% de las empresas de grabación clásica coinciden en el 75% o más en su elección de tecnología de grabación. Hay muchos menos diversidad en el ecosistema de grabación clásica que en otros estilos. Moverse fuera de una determinada línea de cacharros conlleva implicaciones en el material sonoro que en otros estilos permanecerían ocultos. La elección entre grandes equipos para grabación clásica es, a veces, un tema de manías, de matices. Masalec, Prims Sound, Merging Technologies o DAD son las claves para evitar un sonido con dureza, siempre que la sala en el que se registra el sonido «responda bien», libre de resonancias parásitas.

La sala en la que se graba tiene valor histórico, arquitectónico, sociológico. Rara vez está documentada en la documentación pública de la grabación. Recurso una grabación de sensacional violoncelista holandés A. Bylsma de las suite para Violonchelo sin acompañamiento en la iglesia de Dornheim, cerca de Arnstad, en donde trabajó y contrajo matrimonio con su primera esposa Barbara. Esta información añade un significado especial. Me gustaría visitarla.

En la escucha valoro en todo momento la dimensión social y material del entorno de grabación, un espacio específico con su historia y sus condicionantes. Mi papel como experto consiste en lograr que una iglesia o una bodega que suenen lo menor posible acorde con la función que desempeñan. Esto último es muy importante.. La grabación debería transcurrir en un espacio humano que refleje parte del mensaje de la obra. Me gusta grabar música de cámara en salones tardo renacentistas o barrocos de La Laguna. Ninguno es especialmente brillante si consideramos el factor de las condiciones acústicas. Aún así recogen el ambiente de una forma especial. La superposición de la música a la arquitectura es un valor que me gusta escuchar. Las grabaciones tiene mucho de paisaje natural. Si escucho una gran orquesta en un gran escenario histórico destaco mejor cada logro pequeño técnico. Esto no significa que lo contrario no aporte valor, las grabaciones en estudio permiten exponer la música de una forma más controlada, especializada. En las grabaciones de Jazz en directo puede observarse con claridad este asunto. Grabar a pequeños grupos en cafés o bares saturados aporta significado a la escucha. Grabar en estudio aporta otra dimensión, ni mejor ni peor. El espacio, los materiales, la arquitectura, hasta las variables sociales que las produjeron se escuchan en una grabación.

Existen grabaciones orquestales con un sonido justo y espaciado en los que los instrumentos no se pisan, no se atropella, amplitud entre los instrumentos. En otros casos se percibe la falta de espacio, un sonido «ocluso» en el que no hay fronteras claras que separen cada instrumentos. Los genios de la grabación se las arreglan para presentar un sonido global potente dentro de una microdinámica por instrumentos separada y diferenciada. Nunca lo he logrado. Envidio a los técnicos que lo logran. Hoy en día alguna grabaciones no son esféricas, no hay intersticios, no se sienten huecos, la proximidad las resuelta general estridencias. Las distancia entre instrumentos quedan reflejadas en un espacio corto e insuficiente en los ejes laterales y en la profundidad, suenan apelmazadas, como un tarta cuyos ingrediente forman una masa indistinguible. Posiblemente Deutsche Gramaphone sea una de las empresas que mejor logran la sensación de espacio. Otros empresas emborronan los bordes, espacios sin lindes claros, con un centro demasiado acentuado. El uso cada vez menor de un sistema de referencia central y principal hace que las grabaciones sean fragmentadas y dispersas, con diferentes pesos en la imagen que no se comportan con coherencia.

Este tema se relaciona con el tamaño de la imagen estéreo. La amplitud como distancia entre el punto mas extremo de la escucha en el lado derecho respecto a la izquierdo. Dos problemas: (a) centro fuerte, y lados débiles, o lo inverso distribución de (b) la energía está en los canales laterales. Una de las razones por las que me gusta introducir la edición en M/S es controlar el tamaño y los pesos de la imagen estreno final. La primera de las tendencias, un centro poderoso, genera precisión en la localización de instrumentos, reduce oscilación en la imagen de los detalles, y disminuye los problemas de fase, el nivel de correlación e integridad entre los diferentes fuentes y micrófonos. La parte problemática es la la imagen estéreo es pequeña, nada gradual y cerrada. No obstante, una correlación fuerte no siempre es sinónimo de una grabación suprema en el ámbito técnico. La segunda tendencia crea espacio, amplitud, profundidad y por contra emborrona la localización, enturbia la atmósfera, diluye la energía de forma anodina. El punto aristotélico de la moderación requiere experiencia y saber elegir qué sacrificas y porqué. También se escuchan las decisiones.

En un estilo de grabación en el ambiente, por muy bien medida que se encuentren los diferentes sistemas de micrófonos  estos siempre reciben influencia del sonido ambiente, excepto con micrófonos muy direccionales como las cápsulas cardioides tipo MK41, cuyo patrón de sonoro “repele” el sonido circundante excepto unos pocos grados a costa de añadir un perfil de color, coloración adicional “fuera del eje”. Las fronteras entre los lados y el centro del campo sonoro del micrófono deben ser bien entendidos por el experto en grabación y hay que dedicar tiempo a entenderlo. Nunca grabo solistas con micrófonos cercanos y cerrados, al menos mezclo con dos cápsulas, una vierta y otra más cerrada. En la mezcla está el equilibrio.  En general, el tamaño de la imagen estéreo puedo ser medido y visualizado con precisión sin que por ello se le preste la atención que merece. En este tema, el hecho de que el contexto de escucha y los hábitos personales se inclinen a la escucha en auriculares no ha hecho otra cosa que hacer más notable esta tendencia a buscar imagen contundente, agresiva con mucha dinámica y presencia antes que una distribución panorámica bien repartida con una dinámica previamente diseñada por la composición y la aproximación pergeñada de los instrumentos y director.

El grado de transparencia también ocupa una parte nada desdeñable de mi a atención frente a la escucha musical. Las grabaciones deben ser transparente en el sentido que no tiene coloración. este tema debe entenderse correctamente. Significa que no existen ninguna coloración que no tenga su origen en los perfiles de distorsión de los instrumentos, voces y los aportados por la geometría y materiales del ambiente en el que se graba. Esto es importante también y no se siempre se entiende. Un experto en grabación podría optar por una combinación de micrófonos para responder a la naturaleza del color natural de un instrumentos, una voz, o una orquesta concreta. existen condiciones en los que micrófonos muy realista no ayuda a representar lo que hace especial la música en un caso concreto, Color propio de cada fuente siempre existe y debe ser una fuente de riqueza en las grabaciones. Lo que no tiene sentido en las grabaciones clásicas es alterar el color, transfórmalos o exagerarlos. La selección de micrófonos es una tema importante aquí. Algunos micrófonos transparentes no suficientemente sensibles y convierten el color natural es “sonido insípido”, “acromático”. En el jazz es factible grabaciones con matices de color obtenidos con micrófonos de cinta AEA -inconfundible respuesta media y baja- o Coles, o equipos de procesamiento a válvulas como Thermionic Cuture. Cierto tono de color está asociado a las grabaciones históricas con tecnología analógica y forman parte del inconsciente colectivo de los que tenemos más de cincuenta años. En lo particular, agradezco escuchar una buena grabación con leve sabor analógico “de cinta” y «transformadores de germanio» antes que transparente y estéril dirigida las propiedades tímbricas naturales de los instrumentos que pasan inadvertidas.

Casi tengo sesenta años. Nací en el contexto de los reproducciones en discos de vinilo LP. En los años setenta del siglo pasado esperaba ilusionado la compra por mi padre de nuevos discos de jazz y clásica. Mi equipo de escucha en mi infancia era un Goodmann con un sonido inglés impecable, muy puro. Aún hoy espero que los discos de descarga DSD, SACD y CD suenen igual. La tecnología ha avanzado y ahora tenemos la posibilidad ofrecer un sonido prístino, lo cual es una mejora considerable. La escucha de un sonido puro es como estar inmerso en «estado de gracia». Por esta parte, hemos superado los limites del pasado. Por otro lado, las relaciones entre los distintos estilos de grabación son complejas y se pierden los límites entre ellos. Nuevos ingenieros y expertos aplican a los estilos clásicos soluciones y planteamientos de grabados heredados de estilos recientes. Se aplica energía e intensidad extra e innecesaria, se resta importancia a la profundidad, se destacan los registros graves y subgraves, se sobreexponen sin rubor los efectos armónicos de la persuasión y un largo etcétera. La razón es doble. Por un lado los ingenieros son cada vez más jóvenes y comparten otros estilos de referencia junto a la clásica. No hay nada recliminable. Por otro lado, los consumidores finales esperan un sonido fuerte y dinámica aún en una sinfonía de Mozart o en un Laud barroco. El volumen alto de grabación percibido, su dinámica acrecentada, los golpes armónicos son prácticamente exigencias propias del estilo de grabación contemporáneos se trasladan por osmosis natural a la producciones clásicas. Mis clientes me dicen lo mismo: «se oye bajo«. Les explico que el estándar de grabación clásica es de -20 dB (Katz) y que el rango medio de grabación puede oscilar entre un intervalo de -34 dB hasta -1dB FS y que tal amplitud no puede ser expuesta en un volumen alto sin usar artefactos tipo limitaciones y compresores, y automatizar líneas de volumen y que reducen el rango dinámico e introducen coloración, se altera los armónicos naturales y excitan otros que «no pintan nada» en las estructura tonal de la obra o del instrumento. Poco importa, la exactitud no es un valor de moda. Por lo general el cliente me exigen -18dB promedio. Esos dos dB sumados a la media suponen una gran cantidad de energía introducida. Comento a mis clientes que nuestras grabaciones puede subirse el volumen hasta el máximo sin ruido ni distorsión apreciable en el audio. Otra cosa son los equipos reproductores. Escucho, y en ocasiones mido, los decibelios promedios de las grabaciones clásicas y observo como aumentan de forma imparable.

Si ha leído esta segunda parte, y la primera imagino que pensará que las grabaciones actuales son muy malas, lo cual es una impresión incorrecta. Las técnicas de grabación, la formación académica, los adelantos en la ingeniería de grabación y procesamiento analógico y digital, el talento creativo e interpretativo es hoy día mayor que en cualquier otra época, aunque no es perfecto, no perfecto para un determinado criterio entre otros muchos como en un juego de espejos caledoiscópicos. Quizás, y un «quizás» pequeño, podría sospecharse que las grabaciones suenan muy bien aunque también muy iguales en los estilístico y en lo técnico. Posiblemente la excelencia de los medio de grabación destaquen en las grabaciones de estudio en las que se registran los instrumentos por separados y se mantiene bajo con control escrupuloso todas las variables. En las grabaciones realizadas en situación de grandes salas de conciertos o una única sala empleada «ad hoc» con tal fin sin estar preparadas para ello, con técnicas de grabación en directo, en una única o muy pocas sesiones, lo resultados no sean tan espectaculares. La nuestra es una tarea difícil.

 

Un historia curiosa. Micrófonos Sony C100

Hace un mes escribí en twitter una recomendación sobre la obra pianística de Fazil Say publicada el sello disco gráfico Warner. Comenté que era una de las mejores grabaciones que he escuchado en los últimos cinco años sobre un piano clásico. Por otro lado, en el otro extremo de internet, estudiaba por enésima vez el sistema de conversores de la empresa danesa DAD (Digital Audio Denmark). Me gusta examinar cuáles los artistas que trabajan habitualmente con la tecnología óptima para la producción en música clásica y jazz acústico y observar cómo las usan. El ingeniero Jean-Martial Golaz es uno de ellos y curiosamente es el responsable de algunas de las grabaciones de Fazil Say. Coincidencia. Un trabajo increíble. DAD es posiblemente el que ocupa un nivel más alto en el capítulo de transparencia y profundidad en los conversores AD, y muy reconocido en DA – el último eslabón de la cadena de masterización que controla retorno de la cadena analógica al DAW. Junto con lo sistema de Merging Technologies y Prims Audio se sitúan en la cumbre de la conversión utilizados para orquestas. A diferencia de Merging o Prims es una conversión sin previos de micrófonos en su oferta comercial. Su punto fuerte es un sonido super equilibradodesde 44,1kHz hasta 384kHz/DSD. El comportamiento «tranquilo y sereno» de los conversores es en estos momentos una de las características principales que persigo.   Estoy cansado, muy harto también, de sistemas que transmiten una respuesta «nerviosa» y «dura» en el sonido general, aunque muy especialmente en los armónicos y los «transientes buenos» en la parte alta del registro. Hace tres años publiqué un comentario técnico sobre el tema. Existen excelentes marcas de fabricantes para mi gusto personal casi imposibles de aguantar, por ejemplo, es el caso de los micrófonos DPA me sobrepasan así como y la mayoría de conversores del grupo medio, y medio – alto, como el fabricante RME, Universal Audio, Apogge … con la excepción de la conversión de SPL muy infravalorada. Aunque el audio digital formalmente, nominalmente, supere objetivamente a los equipos analógicos, admiro el equilibrio de estos últimos, con una suave curva de respuesta. Se necesita una tecnología de muestreo y conversión realmente espléndida para que los números binarios y la transducción física analógica exhiban propiedades semejantes. No es una cuestión de potencia de cálculo de conversión, tiene que ver con la «linealidad». Existen conversores de hace doce años con una respuesta linea lque me parece no inferior que muchos de la última hornada, por ejemplo los Apogee Rosetta del 2010, los del color rosa, muy difícil de superar en «calidad CD» en relación costo x beneficio incluso en el 2018. En ocasiones compro alguna unidad de segunda mano para proyectos que requieren una dureza, peligro o un trabajo en un entorno de suciedad no apto para los otros equipos de primera línea. Lamentablemente la tecnología en alta resolución AD y DA con una respuesta lineal y alta resolución es un componente costoso, y también el que menos ha evolucionado en los últimos cinco años, y los precios aumentan. Loa fabricantes desde el 2016 optan por instalar sistemas ADDA intermedios en interfaces de alto nivel. Ojalá hubiese comprado dos DAD AX32 hace seis o siete años, me hubiese ahorrado mucho dinero, y también desaliento por confiar en sistemas como RME o Focusrite que no devolvían la respuesta que buscaba. DAD tiene las propiedades idóneas para la grabación clásica, como he mencionado tiene una transparencia no estéril con detalle, espacialidad y «una escucha calmada». El sector de las grabaciones orquestales está plagada de unidades DAD. ¿Qué tiene que lo anterior con los nuevos micrófonos C100 de Sony Proaudio? Mira este video.
https://www.youtube.com/watch?v=50OqliUquqA
Explica las excelencias de un nuevo piano con 102 teclas, un instrumento con recursos ampliados en la gama tonal extrema de instrumentos realizada por el fabricante Stuart & Sons. Aparte de disponer una extensión ampliada de notas, el instrumento resuena de forma muy diferente a un piano convencional de 82 teclas, con la excepción del Bossendofer Imperial de 96 teclas, porque la tabla armónica tiene otras dimensiones y, por tanto una mayor superficie. Ahora es posible recrear obras corales para órgano con un teclado extendidoy presentar un nuevo recurso para los creadores basados en la innovación. La adaptación de la Giga de la Sonata BVW 965 para teclado del J.S. Bach es una interpretación prometedora. Una innovación interesante que demuestra que no siempre hacemos lo mismo, que quedan inconformistas a los que les produce incordiad repetir fórmulas. Me encanta el concepto de este documento promocional. Esta grabación pianística se realiza con conversores DAD AX32, y micrófonos de doble cápsula C100 y dos micrófonos de pequeña membrana ECM 100U (omni) y/o ECM 100N (cardioides) , posiblemente los segundos, todos del fabricante Sony. Estos micrófonos son capaces de enviar información densa desde 10Hz hasta 50kHz sin compresión para un muestreo de 384kHz/DSD. Me recuerdan los micrófonos del fabricante Saken (20 Hz hasta 100 kHz) y los versátiles MKH800T de Sennheiser hasta 50kHz. Es muy interesante la técnica de grabación empleada en el video, con un par AB spots amplios cerca del piano y dos bidireccionales C100 con una técnica par coincidente denominada Blumlein. Les advierto que situar en una grabación estéreo dos bidireccionales de doble cápsula con una par AB es casi una proeza de ingeniería de audio. Debes asumir un sistema de referencia principal, los dos micrófonos C100 o los ECM y esta decisión cambia totalmente el trabajo e mezcla y edición, un total de cuatro canales para la mezcla, y dos campos acústicos distintos que hay que integrar. La grabación con la técnica Blumlein es maravillosa debido a que recoge toda las información directa y la circundante en igualdad, un sonido detallado, abierto a la vez, con muy alta concordancia, en principios no deberían existir tener sin problemas de fase y/o enmascaramiento. Es una de mis técnicas preferidas. La posibilidad de prolongar la edición con procedimientos en M/S, para (a) tratar el centro y los lados de forma distinta en la ecualización y (b) pensar los grados de amplitud de la imagen estéreo. Puedes colocación (c) centrar el sonido del bajo registro sin problemas y separar – distribuir bandas de frecuencias muy próximas en la profundidad para que estén «en su lugar». Después de casi diez años con M/S y cada día me gusta más. Editar en M/S requiere, para nosotros, grabación compatible en M/S. Es verdad que puedes editar casi cualquier sistema un sistema mono o estéreo en M/S gracias a los plugins, pero no es lo mismo. Graba con algunos sistemas en M/S, por separado «M» y «S» con cápsulas especializadas. Si quieres editar en M/S, mi recomendación es que lo hagas con los solistas o instrumentos de especial complejidad armónica, o cuando la sala no es excelente. Aprovechar el poder de un sistema Blumlein, a veces para reutilizarlo como M/S, requiere un hardware de confianza, como por ejemplo el «cacharro» Genimis de SPL, o un plugins de Schoeps o Brainvorx especializado en organizar la grabación bidireccionales simples y dobles. Si te metes con este tipo de grabaciones es que tienes mucha seguridad y sabes muy bien toque haces. Grabar un contrabajo con esta técnica es una experiencia excepcional siempre que logres «cuadrar el circulo», (a) determinar la distancia entre los principales y los demás respecto a él, (b) la situación y altura respecto al puente y la efe del instrumento, y (c) el ángulo o inclinación respecto al mango, (d) hallar la relación entre ambiente y sonido directo con la sala y el resto de instrumentos, (e) calcular la amplitud de la imagen del instrumento grabado en relación con el total de la producción sin entrar en pérdida de fase. La más mínima variación en cualquiera de estas variables produce un sonido diferente, y si trabajas con micrófonos dobles bidireccionales de doble cápsula aún más. Blumlein está muy bien. Tenemos un piano innovador, una técnica grabación con historia muy expuesta que combina detalle y sonoridad abierta, además una tecnología de conversión AD del fabricante DAD, y micrófonos de doble cápsula (mis preferidos) de alta resolución dispuestos a explotar la resolución de los conversores con información densa y minuciosa para cada frecuencia registrada en la parte audible e inaudible. Creo que los preamps son del fabricante estadounidense «Pueblo Audio», una exquisitez, muy parecidos a los previos «Gordon», máxima exponente de la transparencia con profundidad. Observamos un video marketing que agrupa productos de forma admirable. ! Qué sala tan bonita ¡ Los micrófonos C100 de Sony son realmente económicos; diseñados para ofrecer una amplitud y densidad rica en el registro de frecuencias. Los tengo que probar como sea. Cada unidad tiene un valor ligeramente inferior a 1.5K euros, lo que es sorprendente al incluir sistemas de ingeniería común con el Sony C800G del que sobran palabras para definirlo. Desde hace un lustro Sony Proaudio no nos ofrecía unos micrófonos conforme a su prestigio. Ha reforzado con excelencia su modelo de alta resolución y complica aún la elección de micrófonos para empresas pequeñas que miden mucho el volumen de la inversión. No obstante, en estos momentos somos la suma de los pequeños productores los que mantenemos el mercado.

Merging Technologies: Anubis

Hay pocas cosas que se puedan decir de las excelentes interfaces Horus y Hapi de la empresa suiza Merging Technologies. Pocos dispositivos en la grabación clásica pueden competir con las plataformas del fabricante suizo; la mayoría de grandes orquestas clásicas y agrupaciones de cámara de gran prestigio optan por la conversión AD y DA de Merging o por la danesa DAD, simplemente imagínese las más importantes de Europa, Norte de América y Asia. Merging ha diseñados un formidable dispositivo llamadoAnubis, una nueva incorporación con valor propio individual, pero sobre todo, porque complementa las interfaces comentadas más arriba.

Es polifacético, a la vez una interface pequeña de grabación con previos de micrófonos excepcionales, una unidad de monitorización muy avanzada, un sistema que organiza distintos flujos de trabajo muy inteligente y una plataforma gestión de equipos conectados en la red IP Ravenna. Un «equipon» de conversares DA y DA en red con dos entradas entradas preamp 32Bits x ¡¡139 dBa de rango dinámico!! -¡ wow !-, dos para instrumentos tipo jack 1/4″. Tiene dos salidas de línea balanceadas tipo XLR3 junto con otras dos no balanceadas también jack. Hay que sumar dos salidas auriculares independientes. Estamos ante una solución que sirve tanto como controlador de monitorización, mezclador y procesador de baja latencia que se integra con plataformas digitales DAW con ASIO, CoreAudio y ALSA, o con el sistema grande de la familia Masscore + Pyramix. Tiene dos versiones, una hasta 192kHzx32 y otra premium DSD y DXD con la máxima resolución. El software de gestión y la pantalla están muy bien pensadas por lo que he visto en su manual. Lo más importante es que va a ser un complemento esencial para Horus y Hapi remotas muy cerca del ingeniero de grabación o de edición, hasta 256 canales con la máxima resolución. El software de gestión y la pantalla están muy bien pensadas por lo que he visto en su manual. Lo más importante es que va a ser un complemento esencial para las super interface Horus y Hapi.

Con Anubis será factible colocar un sistema Horus junto a los micrófonos y estos al nuevo hardware Anubis por cable para IP con un simple router. La conexión de Anubis con tu DAW es también rápida, sin latencia apreciable, apto para las grabaciones fuera de estudio, además de monitorización bien organizada. Una aportación que aumenta el valor, refuerza la oferta de los sistemas Horus y Hapi. Para la calidad excepcional apoyada por Merging su precio está bien ajustado, unos 2k euros por unidad.

Micrófonos de Modelado

Me pregunta un amigo por email si veo claro lo de adquirir micrófonos de modelado. Son micrófonos de respuesta lineal plana que son procesados más tarde por hardware o plugins para imitar, o incluso replicar micrófonos míticos como los U87 de Neumann, u otros mucho más caros o imposibles de conseguir, como los M50, M149 , U67 originales de Neumann.

Para mi este asunto es sencillo, es una forma comercial de vender hardware y/o plugins extra, y además colocarte un micrófono de precio medio-alto. Antílope -series edge y verge-, o Slate Digital Virtual promocionan sus micrófonos entre 1k y 1,5k euros generalmente con un nivel de control de la fabricación que no es “Made in” Alemanía, Japón o USA, cuya respuesta propia se corresponde con micrófonos de una serie un nivel media. No superan el nivel de calidad base de Neumann TLM 107 o Sonodore MPM 91 de precios muy parecidos y recibes a cambio un nivel es control de fabricación durabilidad y reparación menor.

Mi segunda consideración, es que no imitan la respuesta de los micrófonos históricos. Más bien replican sonoridad de un micrófono neutro dentro de una cadena de previos analógicos. Lo que realmente se promueve es la respuesta de los transformadores analógicos clásicos que se añade a un micrófono sin perfil sonoro. Lo puedes hacer con cualquier plugin decente de compresores clásicos FET o válvulas en la plataforma de Universal Audio. Los test A/B están preparados para el sean iguales. Por otro lado es una forma de mover el negocio de los procesadores FFMPG como valor añadido a las interfase.

Tercer punto. No tiene mucho sentido emular, por ejemplo, los AKG C414 por el mismo precio que los originales.

En los estilos acústicos, los micrófonos de modelado con una fIrma sonora analógica muy caliente no va a ayudarte. Interferirá con el resto de micrófonos que exploran la profundidad y el color natural.

SI va a invertir en preamps y AD de máxima calidad intenta que la respuesta de micrófono sea la máxima posible “en equilibrio”. El procesamiento digital no mejora la sensibilidad de los micrófonos, al contrario, el modelado introduce “ruido”, una señal con cierto nivel de distorsión, la empeora.

Aumenta el procesamiento global en la edición y producción en general. Complican la grabación al activar modelos FFMPG que consumen recursos e interactuán. Lo que es peor, puedes acabar con una mezcla con perfiles sonoros muy distintos e incluso incompatibles, tal como ocurre ahora con los plugins con diferentes color que se aplican antes de la masterización. La presencia de audio muy procesado en la mezcla resulta ser demasiado heterogéneos para que el experto en mastering haga su trabajo. Pensar más en el espacio y menos en la sonoridad final. Mínimo procesamiento y equilibrio en la mezcla, ya habrá tiempo de enmarcarlo con coherencia dentro de un cierto estilo en la fase de masterización. Quiero decir, que esta forma de trabajo pudiera no ser la mejor. Hoy en día parece que el procesamiento lo arregla todo. Es una ilusión.

Los micrófonos de modelado, no son económicos. adquirir grandes micrófonos son en realidad la única inversión segura en un estudio. Algunos de mis micrófonos se han revalorizado en siete años más de un 35% sin considerar la evolución de la moneda. Ahora con la caída del euro mi inversión es aún mayor.

En definitiva, mi opinión como experto, de forma personal y subjetiva, (no soy ingeniero ni he realizado pruebas de laboratorio, y por tanto no puedo realizar dictámenes definitivos si no transmitir un punto de vista) es que es mejor gastar un 15% extra y acceder a micrófonos que de forma natural aporten la respuesta que buscas. En segundo lugar, tus grabaciones con accesorios virtuales no van a sonar igual en condiciones reales de trabajo y el prestigio de la producción puede resentirse.

MQA

Con permiso de http://technologyinsidergroup.com/

Prometí no escribir nada más sobre tecnología musical. Tiempo atrás nuestro planteamiento se centraba en explicar los avances técnicos en el hardware y técnicas de grabación musical dentro de un contexto de decisiones orientado en prioridad de los acústico, de la reverberación natural, las grabaciones multicanales en muy alta resolución del tipo DSD, DXD o 32×196 kHz. Los  sistema de producción se han conformado empresas con una sello sonoro estereotipado y estéril justo en el momento en que era factible acometer producciones en HRES cuantitativamente impresionantes, al menos, si se recupera el ambiente de grabación en toda su complejidad. Una ha sido tan accesible, nunca se ha hecho «tan igual» todo bajo el paradigma de la grabación en estudio con instrumentos y voces separados y grabados por partes. Es una posibilidad aunque no la única. Prefiero grabaciones en directo, con poca edición, la imprescindible y en ambientes reales. Si fuera posible prefiero la conexión analógica desde el micrófono hasta el registro de la vinilo con el tránsito intermedio de una mesa de mezclas. Prefiero los elementos resonantes naturales a los plugins o sistema electrónicos tipo TC- Electronics. Estoy seguro que un cliente valorará la propuesta en su justo valor.  Sobre este tema he escrito cientos de páginas, impartido decenas de charlas y debates con resultado nulo.

Todos los derechos Netabora – NREC. http://netabora.com

En nuestros posts anteriores, ya retiramos aquí por ser una cierta forma de ruido no leído,  hemos sostenido la importancia varios elementos o  procedimientos claves para que la escucha en alta calidad se traslade a un sector de consumidores sensibles a las mejoras. La primera revolución – factor se centraría en (a) la escucha en alta resolución sin depender de costosos DACS, un sonido rico y profundo que pueda trasladarse a una tablet o móvil. La segunda en revolucionar la escucha con un sistema multicanal 5.1 o 7.1 o con el formato de los estudios Galaxy o Auro3D, (b) a través de auriculares “envolventes”. Un matiz. Las técnicas binaurales son interesantes aunque el cuerpo de conocimiento psicofísico en las que se inspira resulta ser un factor limitante  ya que se encuentra anclada en el conocimiento especializado en las últimas décadas del siglo pasado. No se conciben revoluciones en el audio de la «percepción sonora» sin avances tomados de las neurociencias actuales. Lo ideal es que un sistema de escucha privada por auriculares se comporte de forma escalable, es decir, pueda ser escuchado en estéreo convencional, pseudo3D o 3D multicanal. Es simple, seleccionar la mejor mezcla para la escucha en cada momento. Para un ingeniero – experto en producción es un reto difícil pero factible, por contra, para un ingeniero de hardware de escucha en estos momentos es un empresa lejana. Los videojuegos llevan la iniciativa en este terreno. Es trabajoso para un productor  sin que debe renunciar por ellos a posible  crear grabaciones hasta 11.1 canales. Es poco realista esperar que un ingeniero en hardware resuelva en este momento la escucha multicanal en alta definición para un termina móvil, tanto por el diseño del hardware, como por el sistema de «encapsulamiento» del audio más allá del sistema SACD.

MQA es un sistema de escucha que avanza en el primer de los retos explicados antes. Permite enviar información HRES por streaming con resultados homologados a la escucha en 24×384 kHz en condiciones óptimas (a) viene acompañado de un software especializado, (b) con una codificación para programar la respuesta de núcleos de procesamiento para optimizarlos, y/o (c) con  un hardware electrónico específico orientada al procesamiento de los formatos MQA (una especie de DACS especializado en MQA). Usted puede escuchar hasta una calidad igual al CD 24X44,1 kKz sólo por software, por aplicaciones tipo app de android, puede escuchar hasta 24×96 kHz con el añadido de un procesador optimizado (core), por ejemplo a un móvil iPhone, o hasta 24×384 kHz (DXD) con un sistema de filtros procesamiento electrónico – una especie de FPGA insertado en DACS, Tablets y Móviles potentes. El sistema está orientado a la escucha estéreo convencional, con compresión sin pérdida hasta frecuencias de 43 kHz. Técnicamente el ratio de compresión es menor que un fichero PCM cuando trabajas en entorno como piramix de Merging.

Un sonido conforme a nuestro estado tecnológico actual debería unir la alta resolución en 3D  con la portabilidad. MQA facilita la alta resolución por ahora. Por primera vez es concebible un teléfono móvil con capacidad de resolución real equivalente a 32 bit x 386 kKz -con el sólo añadido de una tarjeta integrada especializada- equiparable al DAC. No obstante, no todo es cuestión de técnicas y hardware. Alta resolución debe implicar (a) la adecuación de la resolución con (b) la experiencia analógica del escuchante, y opcionalmente en dependencia del estilo de producción, (c) con la representación realista del ambiente. MQA dispone de un código de datos paralelos preparado para hacer que el comportamiento de conversos DA se comporte con exactitud respecto a AD de la grabación. La arquitectura del formato de audio permite intervenir en el volumen, el ambiente y EQ básica tal como sucedería si se altera el fichero master en la ingeniería de producción, en origen, asunto realmente espectacular aunque muy delicado pues el usuario podría romper el equilibrio y unidad «mágica» que aporta la masterización profesional.

Recientemente he estado haciendo pruebas con la plataforma TIDAL y una producción  nuestra previamente registrada a 24x192Khz.  Los resultados son muy positivos. Con el móvil Xiomi A1 de mi hija puedo escuchar las grabación con calidad CD (24×44,1kHz) y yo diría que se escucha con mayor rango dinámico que el CD. El sonido es muy natural. He retirado hace unos meses todas mis producciones de las demás empresas de distribución online, excepto de TIDAL. Por primera vez tiene sentido grabar, editar y masterizar en un sólo fichero en extrema resolución con repercusiones directas en el hardware de escucha más usado, en las terminales de telefonía móvil. La gente de Tidal me informa que LG ya dispone de un modelo con chips especializado en MQA, si bien para aprovecharlo tendrás que adquirir unos excelente auriculares tipo IE800S sennheiser o sus equivalente en sony y rezar que el efecto de cancelación de ruido externo respete la pureza del audio, tema que no tengo muy claro. Bienvenido el formato MQA.

Para una empresa de grabación esta tuvo elemento en juego obliga repensar algunas decisiones. La primera de ellas es acceder a mejores conversores AD para aprovechar las propiedades del formato MQA. Tal como comentó un experto nacional en hardware hace unos días, el problema se centra en que mientras los conversores DA se han abaratado notablemente si bien la calidad no ha aumentado los sistemas AD han empeorado notablemente. Un conversor del fabricante Masalec de hace diez años es mejor que casi cualquier AD una década después. El problema es que los sistema de los pre-amplificadores de micrófonos y los conversores AD no han mejorado, su alto costo ha obligado a lanzar series medias como si fuesen sistema premium. Los preamps de muy alto nivel son enormemente caros, y la tendencia aumenta. Dicho de otra forma, los componentes digitales son baratos, los componentes claves analógicos son muy cada día más costosos. MQA une su suerte a la escucha analógica pura, a un sonido en el que los estructura del sonido se muestra con claridad y limpieza extrema, sin las estridencias habituales en los conversores digitales actuales.

 

Prometí no escribir nada más sobre tecnología musical. Tiempo atrás nuestro planteamiento se centraba en explicar los avances técnicos en el hardware y técnicas de grabación musical dentro de un contexto de decisiones orientado en prioridad de los acústico, de la reverberación natural, las grabaciones multicanales en muy alta resolución del tipo DSD, DXD o 32×196 kHz. Los  sistema de producción se han conformado empresas con una sello sonoro estereotipado y estéril justo en el momento en que era factible acometer producciones en HRES cuantitativamente impresionantes, al menos, si se recupera el ambiente de grabación en toda su complejidad. Una ha sido tan accesible, nunca se ha hecho «tan igual» todo bajo el paradigma de la grabación en estudio con instrumentos y voces separados y grabados por partes. Es una posibilidad aunque no la única. Prefiero grabaciones en directo, con poca edición, la imprescindible y en ambientes reales. Si fuera posible prefiero la conexión analógica desde el micrófono hasta el registro de la vinilo con el tránsito intermedio de una mesa de mezclas. Prefiero los elementos resonantes naturales a los plugins o sistema electrónicos tipo TC- Electronics. Estoy seguro que un cliente valorará la propuesta en su justo valor.  Sobre este tema he escrito cientos de páginas, impartido decenas de charlas y debates con resultado nulo. En nuestros posts anteriores, ya retiramos aquí por ser una cierta forma de ruido no leído,  hemos sostenido la importancia varios elementos o  procedimientos claves para que la escucha en alta calidad se traslade a un sector de consumidores sensibles a las mejoras. La primera revolución – factor se centraría en (a) la escucha en alta resolución sin depender de costosos DACS, un sonido rico y profundo que pueda trasladarse a una tablet o móvil. La segunda en revolucionar la escucha con un sistema multicanal 5.1 o 7.1 o con el formato de los estudios Galaxy o Auro3D, (b) a través de auriculares “envolventes”. Un matiz. Las técnicas binaurales son interesantes aunque el cuerpo de conocimiento psicofísico en las que se inspira resulta ser un factor limitante  ya que se encuentra anclada en el conocimiento especializado en las últimas décadas del siglo pasado. No se conciben revoluciones en el audio de la «percepción sonora» sin avances tomados de las neurociencias actuales. Lo ideal es que un sistema de escucha privada por auriculares se comporte de forma escalable, es decir, pueda ser escuchado en estéreo convencional, pseudo3D o 3D multicanal. Es simple, seleccionar la mejor mezcla para la escucha en cada momento. Para un ingeniero – experto en producción es un reto difícil pero factible, por contra, para un ingeniero de hardware de escucha en estos momentos es un empresa lejana. Los videojuegos llevan la iniciativa en este terreno. Es trabajoso para un productor  sin que debe renunciar por ellos a posible  crear grabaciones hasta 11.1 canales. Es poco realista esperar que un ingeniero en hardware resuelva en este momento la escucha multicanal en alta definición para un termina móvil, tanto por el diseño del hardware, como por el sistema de «encapsulamiento» del audio más allá del sistema SACD.

MQA es un sistema de escucha que avanza en el primer de los retos explicados antes. Permite enviar información HRES por streaming con resultados homologados a la escucha en 24×384 kHz en condiciones óptimas (a) viene acompañado de un software especializado, (b) con una codificación para programar la respuesta de núcleos de procesamiento para optimizarlos, y/o (c) con  un hardware electrónico específico orientada al procesamiento de los formatos MQA (una especie de DACS especializado en MQA). Usted puede escuchar hasta una calidad igual al CD 24X44,1 kKz sólo por software, por aplicaciones tipo app de android, puede escuchar hasta 24×96 kHz con el añadido de un procesador optimizado (core), por ejemplo a un móvil iPhone, o hasta 24×384 kHz (DXD) con un sistema de filtros procesamiento electrónico – una especie de FPGA insertado en DACS, Tablets y Móviles potentes. El sistema está orientado a la escucha estéreo convencional, con compresión sin pérdida hasta frecuencias de 43 kHz. Técnicamente el ratio de compresión es menor que un fichero PCM cuando trabajas en entorno como piramix de Merging.

Un sonido conforme a nuestro estado tecnológico actual debería unir la alta resolución en 3D  con la portabilidad. MQA facilita la alta resolución por ahora. Por primera vez es concebible un teléfono móvil con capacidad de resolución real equivalente a 32 bit x 386 kKz -con el sólo añadido de una tarjeta integrada especializada- equiparable al DAC. No obstante, no todo es cuestión de técnicas y hardware. Alta resolución debe implicar (a) la adecuación de la resolución con (b) la experiencia analógica del escuchante, y opcionalmente en dependencia del estilo de producción, (c) con la representación realista del ambiente. MQA dispone de un código de datos paralelos preparado para hacer que el comportamiento de conversos DA se comporte con exactitud respecto a AD de la grabación. La arquitectura del formato de audio permite intervenir en el volumen, el ambiente y EQ básica tal como sucedería si se altera el fichero master en la ingeniería de producción, en origen, asunto realmente espectacular aunque muy delicado pues el usuario podría romper el equilibrio y unidad «mágica» que aporta la masterización profesional.

Recientemente he estado haciendo pruebas con la plataforma TIDAL y una producción  nuestra previamente registrada a 24x192Khz.  Los resultados son muy positivos. Con el móvil Xiomi A1 de mi hija puedo escuchar las grabación con calidad CD (24×44,1kHz) y yo diría que se escucha con mayor rango dinámico que el CD. El sonido es muy natural. He retirado hace unos meses todas mis producciones de las demás empresas de distribución online, excepto de TIDAL. Por primera vez tiene sentido grabar, editar y masterizar en un sólo fichero en extrema resolución con repercusiones directas en el hardware de escucha más usado, en las terminales de telefonía móvil. La gente de Tidal me informa que LG ya dispone de un modelo con chips especializado en MQA, si bien para aprovecharlo tendrás que adquirir unos excelente auriculares tipo IE800S sennheiser o sus equivalente en sony y rezar que el efecto de cancelación de ruido externo respete la pureza del audio, tema que no tengo muy claro. Bienvenido el formato MQA.

Para una empresa de grabación esta tuvo elemento en juego obliga repensar algunas decisiones. La primera de ellas es acceder a mejores conversores AD para aprovechar las propiedades del formato MQA. Tal como comentó un experto nacional en hardware hace unos días, el problema se centra en que mientras los conversores DA se han abaratado notablemente si bien la calidad no ha aumentado los sistemas AD han empeorado notablemente. Un conversor del fabricante Masalec de hace diez años es mejor que casi cualquier AD una década después. El problema es que los sistema de los pre-amplificadores de micrófonos y los conversores AD no han mejorado, su alto costo ha obligado a lanzar series medias como si fuesen sistema premium. Los preamps de muy alto nivel son enormemente caros, y la tendencia aumenta. Dicho de otra forma, los componentes digitales son baratos, los componentes claves analógicos son muy cada día más costosos. MQA une su suerte a la escucha analógica pura, a un sonido en el que los estructura del sonido se muestra con claridad y limpieza extrema, sin las estridencias habituales en los conversores digitales actuales.

 

Alegranza

Alegranza, o allegranza, es giro, un quiebro en el proyecto de NREC. Se trata de promover la escucha y participación de la música en las redes sociales. Potenciar la música por placer y por las capacidades que emanan de ella. Es un intento de simbiosis con los procedimientos de escucha y participación de un segmento de población joven que consume mucho tiempo en la música «sin etiquetas» predispuesto a dejarse llevar por las impresiones, preocupado por acceder a contenidos culturales que le aporten experiencia gratificante. «Alegranza» es a la vez una propuesta de acciones técnicas y servicios interesados o desinteresados, un incierto ritmo musical con una cadencia intuitiva fácil de dibujar pero difícil de desentrañar, una descripción de una actitud emocional fruto de una percepción imprevista después de un tiempo largamente esperado -un marinero ve un islote a los lejos y ya conoce su destino- , un terreno bien acotado para innovar, un lugar sin humanos siendo más imaginado que visitado, un bellísimo islote canario de apenas 10km2 al norte de la isla de Lanzarote, más allá la isla de La Graciosa, por cierto, otra porción de tierra y agua con sentido musical y emocional. Preferimos lo que nos sugiere el término de Alegranza. Aquí algunas de las acciones vinculadas a Alegranza:

  1. Difundir contenidos vinculados a la actividad musical desde una esfera amplia. El objetivo clave.
  2. Rejuvenecer en el sentido más general.
  3. Promover conciertos y/o otras actividades musicales en directo a través de los incontables vericuetos y veredas de internet.
  4. Unir creadores e intérpretes sin importar el espacio geográfico del que procedan o la idioma en el que se expresen.
  5. Crear una línea de  programas de podcast variada sobre la música.
  6. Una vez a la quincena mostrar con ánimo de divulgación algunas nuevas investigaciones sobre la relación entre el cerebro y la música.
  7. Entrevistas y conocer a creadores e interpretes y si fuera posible con música en directo y acceso social al mismo.
  8. Un programa sobre escucha con impresiones totalmente subjetivas y debates en los que nadie tiene, ni debe, ni es posible tener la razón. Un retrato de la etno – bio y sociodiversidad que circunvala la música.
  9. Servir de plataforma técnica de apoyo a proyectos canarios relacionados con las bandas de música, la obra coral,  la música clásica en general, el Jazz, a los interpretes que deseen de la OST y OFGC.
  10. Si se le ocurre alguna otra posibilidad también cuenta.

El proyecto debería culminar en una radio por internet  abierta doce horas al día y en una plataforma de escucha bajo demanda. No perseguimos sólo el producto final, intentamos que el principal incentivo sea el proceso mismo. La posibilidad de combinar grabación clásica al máximo  nivel y retransmitir por televisión por IP en internet hace del proyecto un recurso interesante al que pueden sumarse cuantas voluntades lo deseen.

Informaremos del nuevo dominio para Alegranza.

Este será uno de los últimos post escritos aquí. He borrado casi la totalidad de los podcast dedicados (a) a la estrecha relación cerebro – música demasiado densos para el gusto de los tiempos, somos una especia musical y volveré sobre el tema en otro formato más dócil, (b) a las técnicas de grabación, y a (c)  los artefactos novedosos para una productora musical desde un punto  de vista original. De todos los cientos de artículos sólo interesaban los relacionados con la cacharros de grabación y por suerte internet está lleno de referencia a los mismos.